Vistas de página en total

Buscar este blog

jueves, 18 de julio de 2013

16 DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

 "Marta, Marta, andas inquieta y preocupada por muchas cosas"  (Lc 10,41)



Intentemos profundizar en los principales mensajes que nos comunican la primera lectura y el evangelio y tratemos de actualizarlos. Se trata de relatos de hospitalidad, y entre ellos hay diferencias y semejanzas. Una diferencia que se aprecia a simple vista es que los huéspedes aprueban el servicio de Abrahán: «Haz como has dicho» (Gn 18,5); el de Marta, sin embargo, se atrae una reprensión. La semejanza es que en ambos casos el huésped no sólo recibe, sino que aporta también un don: promete un hijo a Abrahán y Sara, y ofrece su palabra en Betania. Recibir al Señor Jesús en nuestra «casa» no significa sólo prestarle «muchos servicios», sino también -antes que nada- dejarle hablar y recibir el don de su Palabra.
La hospitalidad tiene que ser ofrecida también en nombre de Jesús a los hombres con quienes él se identifica: «Fui forastero y me hospedasteis» (Mt 25,35), «No olvidéis la hospitalidad» (Heb 13,2). Hay que dar la oportunidad no sólo de dar, sino también de recibir. ¿Qué ocasiones tenemos?
Las dos hermanas han sido consideradas como dos tipos de vida: activa y contemplativa. En realidad, son más bien ejemplos concretos que ilustran el tercer y cuarto tipos de terrenos de la parábola del sembrador. La «preocupación» y la «agitación» de Marta recuerdan «la semilla que cayó entre cardos», o sea, «los que escuchan el mensaje, pero luego se ven atrapados por las preocupaciones, las riquezas y los placeres de la vida, y no llegan a la madurez» (cf. Lc 8,14). La «mejor parte» de María nos recuerda, en cambio, «la semilla que cayó en tierra buena», o sea, «a los que, después de escuchar el mensaje con corazón noble y generoso, lo retienen y dan fruto por su constancia» (Lc 8,15). ¿Dónde se sitúa nuestro modo de vivir, en el tercero o en el cuarto tipo de terreno?

Vídeo de la semana:

Lecturas del día:


No hay comentarios:

Publicar un comentario