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jueves, 30 de junio de 2011

EL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

"Aprended de mí, que soy sencillo y humilde de corazón"  (Mt 11,29)




·         El Corazón de Cristo es símbolo de la fe cristiana, particularmente amado tanto por el pueblo como por los místicos y los teólogos, pues expresa de una manera sencilla y auténtica la “buena noticia” del amor, resumiendo en sí el misterio de la encarnación y de la Redención.
·         La solemnidad litúrgica del Sagrado Corazón de Jesús es la tercera y última de las fiestas que han seguido al Tiempo Pascual, tras la Santísima Trinidad y el Corpus Christi. Esta sucesión hace pensar en un movimiento hacia el centro: un movimiento del espíritu guiado por el mismo Dios.
·         Desde el horizonte infinito de su amor, de hecho, Dios ha querido entrar en los límites de la historia y de la condición humana, ha tomado un cuerpo y un corazón, para que podamos contemplar y encontrar el infinito en el finito, el Misterio invisible e inefable en el Corazón humano de Jesús, el Nazareno.
·         En mi primera encíclica sobre el tema del amor, el punto de partida ha sido precisamente la mirada dirigida al costado traspasado de Cristo, del que habla Juan en su Evangelio (Cf. 19,37; Deus caritas est, 12).
·         Este centro de la fe es también la fuente de la esperanza en la que hemos sido salvados, esperanza que ha sido el tema de mi segunda encíclica.
·         Toda persona necesita un “centro” para su propia vida, un manantial de verdad y de bondad al que recurrir ante la sucesión de las diferentes situaciones y en el cansancio de la vida cotidiana.
·         Cada uno de nosotros, cuando se detiene en silencio, necesita sentir no sólo el palpitar de su corazón, sino, de manera más profunda, el palpitar de una presencia confiable, que se puede percibir con los sentidos de la fe y que, sin embargo, es mucho más real: la presencia de Cristo, corazón del mundo.
·         Les invito, por tanto, a cada uno de vosotros a renovar en el mes de julio su propia devoción al Corazón de Cristo.
·         Uno de los caminos para revitalizar esta devoción al Corazón de Cristo es valorar y practicar también la tradicional oración de ofrecimiento del día y teniendo presentes las intenciones que propongo a toda la Iglesia.
·         Junto al Sagrado Corazón de Jesús, la liturgia nos invita a venerar el Corazón Inmaculado de María. Encomendémonos siempre a ella con gran confianza.

                                                                    Benedicto XVI

Lecturas del día:



EMIGRACION


Aunque algo extenso, remito el artículo completo dado lo necesario actualmente que resulta su lectura.



Las Hermanitas de la Asunción vivimos y trabajamos en los diferentes continentes. Diariamente entramos en contacto con el sufrimiento insoportable de los migrantes y desplazados de toda edad y cultura. Los vemos llegar por tierra y por mar en condiciones terriblemente precarias, frecuentemente a precio de su vida. Siempre explotados por personas que se aprovechan de la urgencia de dejar el país de origen para acceder a necesidades básicas para ellos y sus familias.
Los encontramos sin casa, con hambre, sin dinero, indocumentados, sin posibilidades de comunicación en un país desconocido. Una experiencia traumática para el resto de su vida que les lleva a refugiarse en guetos con otras personas en situaciones semejantes.El sistema político local utiliza los medios de comunicación para describirlos como invasores que se apropian de los recursos del país al que llegan. Destacan sólo el coste público del financiamiento de programas para los inmigrantes y poco a poco reducen las ayudas.
Los países que acogen, aprueban leyes que no respetan las convenciones y los acuerdos internacionales para migrantes sin tener en cuenta los derechos humanos, hiriendo fuertemente su dignidad. Promueven políticas migratorias inaceptables, basadas en la percepción de los inmigrantes como criminales – terroristas de los que es necesario protegerse, de ahí la creación de lo Centros de Retención y expulsión. Son lugares de violencia y abusos, origen de revueltas sofocadas con más violencia. Esta situación es inaceptable en el siglo XXI. Se cierran las fronteras para las personas, mientras que se abren libremente para las finanzas, el comercio y la información. El racismo y la xenofobia están en aumento.
¿Por qué los inmigrantes dejan su país?
La población migrante se triplicó en los últimos cuarenta años y continuará aumentando. Las causas de este movimiento son muchas: guerra, violencia, desastres naturales y pobreza; todo ello resultado de un desarrollo injusto. Es hora de que nosotros/as y nuestros gobiernos reconozcamos que la gente deja su país porque no hay otra opción para sobrevivir. Las causas de la migración están en las decisiones que tomamos para organizar la vida y las relaciones en diferentes niveles.
En el Sínodo africano del 2009, Monseñor W Avenya, obispo de Makurdi Nigeria, dijo: “Los pueblos africanos van a seguir llegando a Europa, a riesgo de morir en el desierto o en el mar, hasta que no se tome en consideración el equilibrio económico y ambiental entre los dos continentes y el resto del mundo. La responsabilidad de reajustar este desequilibrio tiene que venir del Occidente.” De esto todos/as somos responsables.
No podemos mantener el silencio
Estamos profundamente cuestionadas acerca de:
- La reiterada violación de los derechos humanos fundamentales, los actos de violencia, el tráfico humano, la violencia sexual, la discriminación y las detenciones arbitrarias que se cobran víctimas entre los trabajadores migrantes, particularmente los africanos del Sub-Sahara
- Las intervenciones que detienen peligrosamente a los migrantes en el mar y en las fronteras al interior del país, especialmente los recientes naufragios de centenares de personas a lo largo de las costas del sur de Italia, incluyendo a muchas mujeres y niños que intentaban huir de la guerra en su país.
- La situación humanitaria de miles de trabajadores migrantes y sus familias que están hacinados en Centros de tránsito sin protección, sin acceso al agua, a una alimentación adecuada ni a servicios de salud.
Con un corazón compasivo y una actitud cooperativa
Apoyamos:
- El establecimiento de políticas de desarrollo y comercio internacional que favorezcan una economía justa y sostenible en los países donde el flujo de migrantes es mayor. Una economía que proteja las riquezas naturales de los paises más empobrecidos de la avaricia del occidente rico. Esto permitiría reducir el número de personas llevadas a emigrar por la extrema pobreza.
- Una reforma integral de las políticas migratorias y la preocupación permanente por garantizar a los inmigrantes indocumentados pleno acceso a los derechos fundamentales.
- Reconocer su contribución a la economía del país al que llegan y crear recursos legales que rijan el mercado laboral y garanticen un flujo de migración seguro y económicamente sostenible.
- Facilitar la reagrupación familiar y la unidad de la familia migrante. Mantener los lazos familiares es esencial para llegar a ser plenamente humanos y lograr la estabilidad social.
Reunidas en Capítulo General, nos hacemos más conscientes de la complejidad del movimiento global de los migrantes en el mundo de hoy y del gran sufrimiento impuesto a millones de personas.
Renovamos nuestro compromiso con los migrantes, fortaleciendo nuestras acciones locales en una perspectiva global, trabajando en red con organizaciones internacionales.
Hermanitas de la Asunción
Capítulo General Junio 2011 – París



martes, 28 de junio de 2011

SAN PEDRO Y SAN PABLO

"El Señor me asistió y me confortó"  (2 Tim 4,17)




La liturgia fija hoy algunos momentos en la rica y agitada vida de los dos apóstoles. Domina sobre todos la escena de Cesarea de Filipo, descrita en el fragmento evangélico. ¿Qué retendremos, en particular, de este episodio tan célebre? Estas palabras: «Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia». La Iglesia, pues, no es una sociedad de librepensadores, sino que es la sociedad —o mejor aún, la comunidad— de los que se unen a Pedro en la proclamación de la fe en Jesucristo. Quien edifica la Iglesia es Cristo. Es él quien elige libremente a un hombre y lo pone en la base. Pedro no es más que un instrumento, la primera piedra del edificio, mientras que Cristo es quien pone la primera piedra. Sin embargo, desde ahora en adelante no se podrá estar verdadera y plenamente en la Iglesia, como piedra viva, si no se está en comunión con la fe de Pedro y con su autoridad, o, al menos, si no se tiende a estarlo. San Ambrosio ha escrito unas palabras vigorosas: «Donde está Pedro, allí está la Iglesia». Lo que no significa que Pedro sea por si solo toda la Iglesia, sino que no se puede ser Iglesia sin Pedro.


Lecturas del día:

sábado, 25 de junio de 2011

CORPUS CHRISTI

"El que come de este pan vivirá siempre"  (Jn 6,51)







Te damos gracias, Dios de eterno amor, por el regalo de la eucaristía, comunión y unión con Cristo y los hermanos. Cuando participamos en la eucaristía no sólo nos unimos a Cristo y formamos una sola cosa con él (“un solo cuerpo”), sino que nos ponemos en común unión entre nosotros y nos convertimos en «un solo cuerpo» con Cristo y los demás. Te pedimos perdón porque no siempre hemos experimentado el misterioso e irresistible atractivo de la eucaristía, porque a veces hemos gastado el tiempo en conseguir seguridades personales, embaucados por nuestros egoísmos y atrapados por la desesperación.

Te rogamos, Padre, que nos concedas el don de la sabiduría para que comprendamos que la fatigosa peregrinación por el desierto de nuestra vida es ya una confortable estancia en la patria del cielo. Porque «no sólo de pan vive el hombre», sino de ese «pan» que es él, en cuanto Hijo de Dios, enviado al mundo para salvarlo. Te suplicamos que, comulgando del cuerpo de Cristo, nos convirtamos en lo que somos, como nos dice san Agustín: cuerpo de Cristo y miembros los unos de los otros. Este es el deseo profundo que queremos cultivar con la oración y en el corazón: dejar que tú, Señor, obres este milagro en nosotros. Tú eres el Señor, tú lo puedes todo. Amén.



Lecturas del día:
http://www.aciprensa.com/calendario/calendario.php?dia=26&mes=6&ano=2011



NUEVO HORARIO DE MISAS

A partir del próximo 1 de julio, la Eucaristía de lunes a sábado se traslada a las 8:30 de la tarde.
La Eucaristía dominical será a las 13:15

LAS COSAS IMPORTANTES SE HACEN CON EL CORAZÓN

El día de Caridad es un momento privilegiado en el que Cáritas comparte con toda la comunidad el trabajo que está desarrollando a favor de las personas que viven en situación de dificultad. Esta tarea es posible gracias al compromiso y al compartir de los voluntarios, socios, donantes y trabajadores, que colaboran en la construcción de un mundo más justo y humano.
Cáritas vive preocupada por la grave situación de crisis que afecta a muchas familias. Esta situaciones, al mismo tiempo, una oportunidad para plantarnos un estilo de vida más justo, fraterno y solidario.
A pesar de esta situación, damos gracias por tantas muestras de generosidad y entrega hacia los demás. La incorporación de nuevos voluntarios, socios, donantes, la respuesta y esfuerzo de las parroquias son verdaderos signos de cercanía, apoyo y esperanza.


Informe Cáritas 2010:
http://www.caritasalamanca.org/uploads/media/memoria_2010_web_ok.pdf

jueves, 23 de junio de 2011

FESTIVIDAD DE SAN JUAN BAUTISTA

"Serás llamado profeta del Altísimo, pues irás delante del Señor a preparar sus caminos"  (Lc 1,76)


San Juan Bautista, por Teófanes el griego, s. XIV. La dignidad y santidad de la persona representada no merece comentario, es evidente. Los cuerpos de los santos en los iconos son representados como ya transfigurados, no son los cuerpos de carne y hueso de este mundo. Y sus actitudes están más allá de los gestos habituales de nuestra vida ordinaria.


El primer testigo cualificado de la luz de Cristo fue Juan el Bautista. En su figura captamos la esencia de toda misión y testimonio. Por eso ocupa una posición tan importante en el prólogo y emerge con su misión antes incluso de que la Palabra aparezca en la carne. Es testigo con las vestiduras de precursor. 

Eso significa sobre todo que él es el final y la conclusión de la antigua alianza y que es el primero en cruzar, viniendo de la antigua, el umbral de la nueva. En este sentido, es la consumación de la antigua alianza, cuya misión se agota aludiendo a Cristo. Por otra parte, Juan es el primero en dar testimonio realmente de la misma luz, por lo que su misión está claramente del otro lado del umbral y es una misión neotestamentaria. La tarea veterotestamentaria confiada por Dios a Moisés o a un profeta era siempre limitada y circunscrita en el interior de la justicia. Esta tarea era confiada y podía ser ejecutada de tal modo que mandato y ejecución se correspondieran con precisión. La tarea veterotestamentaria confiada a Juan contiene la exigencia ilimitada de atestiguar la luz en general. Es confiada con amor y —por muy dura que pueda ser— con alegría, porque es confiada en el interior de la misión del Hijo. 



Lecturas del día:
http://www.aciprensa.com/calendario/calendario.php?dia=24&mes=6&ano=2011

lunes, 20 de junio de 2011

JMJ ACOGIDA PARROQUIAL

Se necesita colaboración económica y humana para acoger y atender fraternalmente a los 30 jóvenes de Venezuela y Estados Unidos que estarán viviendo en el centro parroquial del 11 al 15 de agosto. Gracias de antemano.



sábado, 18 de junio de 2011

LA SANTÍSIMA TRINIDAD

"En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu"





¡Oh Dios mío, Trinidad a quien adoro!  Ayúdame a olvidarme totalmente de mí, para instalarme en Ti, inmóvil y serena, como sí mi alma estuviera ya en la eternidad. Que nada pueda turbar mi paz, ni hacerme salir de Ti, mi Dios inmutable,  sino que cada momento me sumerja más adentro en la profundidad de tu Misterio.
Pacifica mi alma, haz en ella tu cielo, tu morada más querida y el lugar de tu descanso.  Que nunca te deje solo allí, sino  que esté por entero allí contigo, bien  alerta en mi fe, en total adoración y completamente entregada a tu Acción creadora.
¡Oh mi Cristo amado, crucificado por amor! Quisiera ser una esposa para tu Corazón; quisiera cubrirte de gloria; quisiera amarte... hasta morir de amor.
Pero conozco mi impotencia, y te pido que me «revistas de ti mismo», que identifiques mi alma con todos los sentimientos de tu alma, que me sumerjas en Ti, que me invadas, que ocupes Tú mi lugar, para que mi vida no sea más que una irradiación de tu Vida. Ven a mí como Adorador, como Reparador y como Salvador.
¡Oh Verbo eterno, Palabra de mi Dios! Quiero pasar mi vida escuchándote, quiero ser toda oídos a tu enseñanza para aprenderlo todo de Ti. Y luego, en medio de todas las noches, de todos los vacíos y de toda mi ineptitud, quiero vivir con los ojos clavados en Ti sin apartarme nunca de tu inmensa luz.
¡Oh mi Astro querido! Fascíname de tal manera, que ya nunca pueda salirme de tu radiación.
¡Oh Fuego devorador, Espíritu de Amor! «Ven a mí» para que se produzca en mi alma una especie de encarnación del Verbo: que yo sea para Él una humanidad de recambio en la que El pueda renovar todo su misterio.
Y Tú, ¡oh Padre!, inclínate sobre esta pobre criaturita tuya, «cúbrela con tu sombra», y no veas en ella más que a tu «Hijo predilecto, en quien has puesto todas tus complacencias».
¡Oh mis Tres, mi Todo, mi eterna  Bienaventuranza, Soledad infinita, Inmensidad donde me pierdo! Me entrego a Ti como víctima. Abísmate en mí para que yo me abisme en Ti, hasta que vaya a contemplar en tu luz el abismo de tus grandezas.

                             Sor Isabel de la Trinidad.

Lecturas del día:

http://www.aciprensa.com/calendario/calendario.php?dia=19&mes=6&ano=2011

jueves, 16 de junio de 2011

ES EL CAPITALISMO



De todos los debates que hay en mi sociedad, el que más me importa es el del paro. El paro es una realidad compleja y diversa, que admite matices y concreciones. Pero, eso sí, prácticamente todas malas. Me importa sobremanera esa experiencia dramática de no contar con un trabajo decente, ¡Benedicto XVI dixit! Vivir de prestado, con casi nada y a la intemperie. Me importa ante todo la gente en cuyos hogares nadie tiene trabajo. Me pregunto de qué viven, y por lo que conozco, me cuentan y me imagino, “viven” entre la “mendicidad familiar” y la “social”. En realidad, malviven, y esperan los lunes al sol.
No soy dado a las lecturas generales a partir de tal o cual caso. Pero las cifras cantan y si hay casi cinco millones de parados, por mucha “economía sumergida” que nos imaginemos, la caldera tiene que estar a punto de estallar. Doctores tiene la sociología para explicar por qué no pasa lo que dicen que debería pasar. Misterios de la vida social. “Gracias a Dios”, y perdón por mentarlo en este tema, lo que parece que podría pasar, no pasa, y lo que pasa, “Democracia Real Ya”, es más que razonable. Pero esa gente es real y, con las más variopintas situaciones, entra en su casa, cierra la puerta y enciende el televisor para olvidar su drama. Ese “su”, de drama, es un adjetivo posesivo, y realmente es el más injusto de los posesivos. Todo tuyo, “su” drama, no tenemos envidia.
Nosotros, los profesores de ética, teológica o no, pero moral al cabo, y reflexión sobre cómo vivir bien, es decir, obrando bien, solemos ser tachados de ingenuos. En parte, con razón, porque tendemos a proclamar buenas intenciones o virtudes, y creemos que eso lo podría resolver casi todo. Es cierto, somos ingenuos. El ser humano es lo que es, y no podemos pensarlo como “a los dioses”, es decir, altruista, justo y pacífico en cualquier caso y situación. No, los valores y las mejores actitudes personales son imprescindibles, pero son una parte de la solución. La otra es la inteligencia para dotarnos de estructuras sociales y leyes justas, y la voluntad de hacerlas respetar y cumplir por todos, y especialmente por los más fuertes y peligrosos de entre nosotros. Suelen ser los mismos. Y esto sí que es importante. La justicia social requiere de personas “buenas”, pero no menos de estructuras sociales justas. Todos lo sabemos, pero callamos ante sus quiebras: la propiedad acumulada sin límite, la información sesgada por intereses de partido y capital, las finanzas a su libre juego y más oscuras que una cueva, las élites recomponiendo mil veces sus posiciones de poder… y el poder político convocándolas para “contarles” sus medidas… todo menos hablar con realismo de oportunidades de vida digna para todos, Y, ¿qué es de la democracia sin este requisito de las oportunidades reales de vida, siquiera hasta que decidimos por nuestra cuenta qué vida llevar?
Hace un tiempo y viendo las orejas al lobo, se me ocurrió defender otra idea de moralistas. Un pacto social en España había de ser tan necesario, como injusto con muchos trabajadores, pero menos malo que lo que se avecinaba. No me imaginaba que la recomposición del beneficio capitalista, ¡perdón por la palabra!, llegara a los extremos de estos días. Después me explicaron “los políticos” que un pacto social era imposible por dos razones. Cuando lo dije, porque los trabajadores fijos no lo querían; y cuando pensaron que podían quererlo, porque ya no lo quería el capital. En suma que lo del pacto social ya es una salida social superada. ¿Sí? Creo que no. ¿Todavía? Todavía.
Cuentan que el dinero, ¡el capital!, tiene una carta comodín: “¡En cualquier lugar hay alguien dispuesto a hacer el trabajo por menos que usted! Difícil pacto, entonces. Y añaden que el dinero, ¡el capital!, exige derecho “natural” a entrar y salir por donde quiera, y esto para el mayor bien de todos. ¡Qué cara! El bien posible, claro está, - dicen -, pues “el bien digno”, ese no existe; eso es moral. Y hasta los pobres, - concluyen -, se benefician razonablemente de este hipercapitalismo financiero; por supuesto, dentro de lo posible. El mercado es el secreto científico de todo. Ya se conoce el timo: “nadie pierde, todos ganamos, aunque no todos lo mismo”. Y se van a casa en paz. Cada uno con lo suyo. Aquellos, los parados, con su drama; los otros, con sus “dividendos”. Curiosas analogías sobre el significado de “lo suyo”.
Y aquí viene la política y su administración profesional. ¡Qué no me toquen lo mío! Quieren su porción del pastel. Y como los del capital ya se han llevado su parte creciente, y “la política” su parte no menguante, los ahorros tienen su destinatario natural. Yo diría martirial: los parados sin prestación, las pensiones más bajas, los inmigrantes sin empleo, las mujeres y los jóvenes en situaciones laborales, más que precarias, ofensivas…. Y al fondo suena la música, son “los medios”. Hay de todo, pero han aparecido tantos “telepredicadores” y tan esclavos de sus ideologías políticas, que hasta sus lágrimas por los parados parecen, a menudo, de cocodrilo. Las tertulias de Intereconomía son el paradigma contemporáneo de lo que es hablar de todo para callar sobre lo fundamental. Terrible. Me pregunto siempre de qué viven ellos y quién es su “señor”.
Pues nada, ahora me doy cuenta de que hay dos palabras que suenan anacrónicas en estos días, “DiosCapital”. Me alegro, poco a poco comienza a verse claro que su gente está en distinto bando. “No podéis servir a Dios y al Dinero”. Está más claro que el agua, todas las soluciones sociales del dinero, ¡el capital!, son a la fuerza, impuestas, injustas e inmorales. Y si salen adelante, y salen, ¡vaya que sí!, es porque tienen sojuzgados a los pueblos y a sus Gobiernos. Ahora hablemos con realismo de lo que es posible hacer tras el 15M, pero no callemos la verdad económica de la vida social, porque ofende a la inteligencia de la gente. Ahora hablemos de actitudes en las personas, pero referidas a estructuras sociales de poder y propiedad. A la vez. 

Jose Ignacio Calleja. Experto en Moral Social Cristiana


miércoles, 15 de junio de 2011

ANTE LA FIESTA DE LA TRINIDAD

 No siempre se nos hace fácil a los cristianos relacionarnos de manera concreta y viva con el misterio de Dios confesado como Trinidad. Sin embargo, la crisis religiosa nos está invitando a cuidar más que nunca una relación personal, sana y gratificante con él. Jesús, el Misterio de Dios hecho carne en el Profeta de Galilea, es el mejor punto de partida para reavivar una fe sencilla.
¿Cómo vivir ante el Padre? Jesús nos enseña dos actitudes básicas. En primer lugar, una confianza total. El Padre es bueno. Nos quiere sin fin. Nada le importa más que nuestro bien. Podemos confiar en él sin miedos, recelos, cálculos o estrategias. Vivir es confiar en el Amor como misterio último de todo.
En segundo lugar, una docilidad incondicional. Es bueno vivir atentos a la voluntad de ese Padre, pues sólo quiere una vida más digna para todos. No hay una manera de vivir más sana y acertada. Esta es la motivación secreta de quien vive ante el misterio de la realidad desde la fe en un Dios Padre.
¿Qué es vivir con el Hijo de Dios encarnado? En primer lugar, seguir a Jesús: conocerlo, creerle, sintonizar con él, aprender a vivir siguiendo sus pasos. Mirar la vida como la miraba él; tratar a las personas como él las trataba; sembrar signos de bondad y de libertad creadora como hacía él. Vivir haciendo la vida más humana. Así vive Dios cuando se encarna. Para un cristiano no hay otro modo de vivir más apasionante.
En segundo lugar, colaborar en el Proyecto de Dios que Jesús pone en marcha siguiendo la voluntad del Padre. No podemos permanecer pasivos. A los que lloran Dios los quiere ver riendo, a los que tienen hambre los quiere ver comiendo. Hemos de cambiar las cosas para que la vida sea vida para todos. Este Proyecto que Jesús llama "reino de Dios" es el marco, la orientación y el horizonte que se nos propone desde el misterio último de Dios para hacer la vida más humana.
¿Qué es vivir animados por el Espíritu Santo? En primer lugar, vivir animados por el amor. Así se desprende de toda la trayectoria de Jesús. Lo esencial es vivirlo todo con amor y desde el amor. Nada hay más importante. El amor es la fuerza que pone sentido, verdad y esperanza en nuestra existencia. Es el amor el que nos salva de tantas torpezas, errores y miserias.
Por último, quien vive "ungido por el Espíritu de Dios" se siente enviado de manera especial a anunciar a los pobres la Buena Noticia. Su vida tiene fuerza liberadora para los cautivos; pone luz en quienes viven ciegos; es un regalo para quienes se sienten desgraciados.

De  Eclesalia.net

sábado, 11 de junio de 2011

PENTECOSTÉS

"Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor"  (de la liturgia)





La Iglesia tiene necesidad de su perenne Pentecostés. Necesita fuego en el corazón, palabras en los labios, profecía en la mirada. La Iglesia necesita ser templo del Espíritu Santo, necesita pureza total, vida interior. La Iglesia tiene necesidad de volver a sentir subir desde lo profundo de su intimidad personal, como si fuera un llanto, una poesía, una oración, un himno, la voz orante del Espíritu Santo, que nos sustituye y ora en nosotros y por nosotros “con gemidos inefables” y que interpreta el discurso que nosotros solos no sabemos dirigir a Dios. La Iglesia necesita recuperar la sed, el gusto, la certeza de su verdad, y escuchar con silencio inviolable y dócil disponibilidad la voz, el coloquio elocuente en la absorción contemplativa del Espíritu, el cual nos enseña “toda verdad”.

A continuación, necesita también la Iglesia sentir que vuelve a fluir, por todas sus facultades humanas, la onda del amor que se llama caridad y que es difundida en nuestros propios corazones “por el espíritu Santo que nos ha sido dado”. La Iglesia, toda ella penetrada de fe, necesita experimentar la urgencia, el ardor, el celo de esta caridad; tiene necesidad de testimonio, de apostolado. ¿Lo han escuchado, hombres vivos, jóvenes, almas consagradas, hermanos en el sacerdocio?. De eso tiene necesidad la Iglesia. Tienen necesidad del Espíritu Santo en nosotros, en cada uno de nosotros y en todos nosotros a la vez, en nosotros como Iglesia. Si, es del Espíritu Santo de lo que, sobre todo hoy, tiene necesidad la Iglesia. Decidle, por tanto, siempre: “¡VEN!”
                                  Pablo VI                                                                                                                                            
  
Lecturas:
http://www.aciprensa.com/calendario/calendario.php?dia=12&mes=6&ano=2011

jueves, 9 de junio de 2011

INVOCACIÓN


Según San Juan, el Espíritu hace presente a Jesús en la comunidad cristiana, recordándonos su mensaje, haciéndonos caminar en su verdad, interiorizando en nosotros su mandato del amor. A ese Espíritu invocamos en esta fiesta de Pentecostés.
Ven Espíritu Santo y enséñanos a invocar a Dios con ese nombre entrañable de "Padre" que nos enseñó Jesús. Si no sentimos su presencia buena en medio de nosotros, viviremos como huérfanos. Recuérdanos que sólo Jesús es el camino que nos lleva hasta él. Que sólo su vida entregada a los últimos nos muestra su verdadero rostro. Sin Jesús nunca entenderemos su sed de paz, de justicia y dignidad para todos sus hijos e hijas.

Ven Espíritu Santo y haznos caminar en la verdad de Jesús. Sin tu luz y tu aliento, olvidaremos una y otra vez su Proyecto del reino de Dios. Viviremos sin pasión y sin esperanza. No sabremos por qué le seguimos ni para qué. No sabremos por qué vivir y por qué sufrir. Y el Reino seguirá esperando colaboradores.
Ven Espíritu Santo y enséñanos a anunciar la Buena Noticia de Jesús. Que no echemos cargas pesadas sobre nadie. Que no dictaminemos sobre problemas que no nos duelen ni condenemos a quienes necesitan sobre todo acogida y comprensión. Que nunca quebremos la caña cascada ni apaguemos la mecha vacilante.
Ven Espíritu Santo e infunde en nosotros la experiencia religiosa de Jesús. Que no nos perdamos en trivialidades mientras descuidamos la justicia, la misericordia y la fe. Que nada ni nadie nos distraiga de seguirlo como único Señor. Que ninguna doctrina, práctica o devoción nos aleje de su Evangelio.
Ven Espíritu Santo y aumenta nuestra fe para experimentar la fuerza de Jesús en el centro mismo de nuestra debilidad. Enséñanos a alimentar nuestra vida, no de tradiciones humanas ni palabras vacías, sino del conocimiento interno de su Persona. Que nos dejemos guiar siempre por su Espíritu audaz y creador, no por nuestro instinto de seguridad.
Ven Espíritu Santo, transforma nuestros corazones y conviértenos a Jesús. Si cada uno de nosotros no cambia, nada cambiará en su Iglesia. Si todos seguimos cautivos de la inercia, nada nuevo y bueno nacerá entre sus seguidores. Si no nos dejamos arrastrar por su creatividad, su movimiento quedará bloqueado.
Ven Espíritu Santo y defiéndenos del riesgo de olvidar a Jesús. Atrapados por nuestros miedos e incertidumbres, no somos capaces de escuchar su voz ni sentir su aliento. Despierta nuestra adhesión pues, si perdemos el contacto con él, seguirá creciendo en nosotros el nerviosismo y la inseguridad.

De  Eclesalia.net

domingo, 5 de junio de 2011

DÍA DE LA CARIDAD 2011

Las cosas importantes se hacen con el corazón.

Bajo este lema, Cáritas Diocesana de Salamanca inicia la campaña del día de la Caridad. El  sábado 4 de junio tuvo lugar un paseo en bicicleta por el centro de la ciudad que terminó en la plaza del Concilio de Trento.
La jornada comenzó a las 19:00 h en la puerta Zamora. El recorrido fue por el centro de la ciudad terminando a las 19:45 en la Plaza del Concilio de Trento (junto a la Iglesia de San Esteban), a lo largo del camino se realizaron dos paradas en la plaza del Poeta Iglesias y en el Puente Romano. Al finalizar el trayecto, compartimos un rato de convivencia amenizado por un grupo musical.
El día de Caridad, es la fiesta de Cáritas, donde a parte de presentar a toda la comunidad el trabajo que está desarrollando a favor de las personas que viven en situación de dificultad, celebramos y agradecemos la tarea que es posible gracias al compromiso y al compartir de voluntarios, socios, donantes y trabajadores, que colaboran en la construcción de un mundo más justo y humano.
La campaña institucional de este año: “las cosas importantes se hacen con corazón”, nos invita con urgencia a repensar nuestro estilo de vida desde LA FRATERNIDAD Y EL COMPROMISO.












ACTIVIDADES VERANO PROGRAMADAS


CAMPO DE TRABAJO - Del 18 al 23 de Julio. Edades de 13 a 16 años.
RUTA DE LA PLATA -  Del 11 al 16 de Julio. Jóvenes mayores de 16 años.
RUTA POR LA SIERRA DE FRANCIA - Del 27 al 31 de Julio. Para todas las edades.

sábado, 4 de junio de 2011

ORACIÓN DE SILENCIO

A partir del próximo miércoles 8 de junio, la oración de silencio cambia de hora, empezando en lugar de a las 5, a las 6 de la tarde de los miércoles. Invitamos nuevamente a todos los interesados (o necesitados) de un rato a solas con el Señor, contemplándole, a asistir y estar con Él esa hora.

LA ASCENSIÓN DEL SEÑOR


"La fidelidad del Señor dura por siempre"  (Sal 116,2)



Lecturas de la solemnidad:
http://www.aciprensa.com/calendario/calendario.php?dia=5&mes=6&ano=2011



“No; yo no dejo la tierra. No; yo no olvido a los hombres. Aquí yo he dejado la guerra: arriba están vuestros nombres”. Esos versos de José Luis Blanco Vega nos ayudan a iniciar la oración de la alabanza en la mañana de la solemnidad de la Ascensión del Señor. En ellos escuchamos un eco de la despedida de Jesús.
Efectivamente, su Ascensión a los cielos no significa un desprecio de esta tierra que recorrieron sus pies. Ni un desaire a los hombres a los que consideraba en verdad como sus hermanos y amigos. Él era el primogénito de entre los muertos. Y con él llevaba hasta la gloria eterna de Dios a la humanidad entera, sus gozos y sus lamentos.
Su Ascensión nos invita a mirar a los cielos, sin olvidar las tareas que nos han sido encomendadas en este suelo. El verso nos recuerda que “arriba están nuestros nombres”. Como escribía San Pablo, “nuestra ciudadanía está en los cielos”. Somos peregrinos y exiliados, siempre enganchados por la nostalgia de nuestra patria.

NUESTRO INTERCESOR

En el Credo profesamos nuestra fe en la gloria del Resucitado:  “Jesucristo subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso”. Son palabras que repetimos con frecuencia. Pero necesitan una reflexión para que puedan iluminar nuestra vocación de creyentes y nuestra tarea de cada día.
- Los “cielos” son en el pensamiento hebreo una expresión con la que se pretende evitar el nombre sagrado de Dios. Subir a los cielos no significa, por tanto un ascenso a un lugar del espacio estrellado, que, de todas formas quedaría tan lejos de Dios como la superficie de la tierra. Subir a los cielos significa abrirnos el camino hacia Dios.  “Sólo Cristo ha podido abrir este acceso al hombre”, como dice el Catecismo de la Iglesia Católica.
- También el asiento junto a Dios es otra bella imagen. Con ella se indica la dignidad divina de Jesús. Y la intimidad que en la gloria se concede al que se había abajado como un esclavo. “Sentarse a la derecha del Padre significa la inauguración del reino del Mesías”, como explica el mismo Catecismo. Ahora sabemos que el Señor es igual al Padre en cuanto Dios e intercesor y mediador de todos los que nos gozamos de ser sus hermanos.

EL CONSUELO Y LA FUERZA

En el texto evangélico que hoy se proclama (Mt 28, 12-20) Jesús envía a sus seguidores a hacer discípulos de todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo y a enseñarles a guardar todo lo que él había mandado”. Ésa es nuestra tarea en todo tiempo y en todo lugar.
Pero no estamos solos en esa misión. Jesús se despide diciendo: “Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo”.
• “Yo estoy con vosotros”. Jesús había sido anunciado como el “Emmanuel”, que significa “Dios con nosotros”. A la hora de su despedida quiere dar fe de aquel nombre y de aquella misión. Él es el Dios hecho humano que ha estado y estará para siempre con nosotros.
 • “Yo estoy con vosotros”. Está con nosotros en su Palabra, en la asamblea de sus fieles, en el misterio eucarístico del pan y del vino y en la presencia interpelante de los hambrientos y sedientos, y de todos los pobres y marginados.
• “Yo estoy con vosotros”. Él está con nosotros en el consuelo que nos transmite gracias a su Espíritu y en la fuerza con que el mismo Espíritu nos ayuda a dar testimonio de su vida y de su misión en este mundo nuestro.
- Señor Jesús, creemos que en tu Ascensión has llevado contigo nuestra humanidad. Intercede por nosotros y ayúdanos a mantener viva la esperanza. Amén. Amén. Amén.

José-Román Flecha Andrés
Universidad Pontificia de Salamanca


Para una catequesis del icono seguir el enlace siguiente

http://bibliayliturgia.blogspot.com/2011/06/el-icono-de-la-ascension-hch-11-12-y-lc.html